domingo, 24 de agosto de 2008

en la insensatez...

"Recordad, además, el proverbio griego que dice: «Los locos a veces dicen la verdad», a menos que penséis que este refrán no reza con las mujeres."
Insensatez: falta de sensatez, también locura. Sensatez: prudencia, buen juicio, sentido común. ¿A qué vienen estas definiciones de la Real Academia? es que me quedé colgada con un comentario del post anterior que preguntaba cuál era el fin de escribir algo sin sentido o que no se entienda

"Diga lo que quiera de mí el común de los mortales, pues no ignoro cuán mal hablan de la Estulticia incluso los más estultos, soy, empero, aquélla, y precisamente la única que tiene poder para divertir a los dioses y a los hombres." (Erasmo, Elogio de la locura)

En primer lugar, quiero aclarar que si hay algún adjetivo que bien me califique, creo que es el de la insensatez.
Y no porque no tenga sentido mi vida, sino porque no lo estoy buscando, porque no me parece que el sentido sea algo que está ahí dado y pueda definirse. El sentido de mi vida lo construyo cada día en las acciones que realizo. Por lo que no puedo contestar acerca de cual es el sentido de escribir algo que no se entienda porque no es algo que me haya preguntado antes de escribir, ni tampoco que me interese responder.
Además, considero que el preguntarse siempre por el sentido de algo y el creer que ese sentido, primero existe y segundo es único, es la primera insensatez de todas. A mi modo de ver, si es que hay sentido, al menos no es uno solo, y tiene que ver con la subjetividad del que intente definirlo.
Que me digan insensata, o lo que es lo mismo o parecido, que estoy loca, para mi es un halago, me da la pauta que puedo salirme de la normalidad reinante y a partir de éste, mi no mundo, desde mi no lugar, desde el borde puedo cuestionar esas normalidades que tanto agobian a las mentes abúlicas de nuestro tiempo.
Si estoy loca por pensar diferente, mejor para mí, si no fuera por esta insensatez, no estaría por emprender en los próximos días este viaje que tanto espero, que tiene rumbo al norte pero que me hace apreciar mi sur cada vez más.
Porque cada día menos que falta para subir al avión, me hace reafirmar que elegí el mejor camino, porque lo que me espera es un mundo nuevo sin sentido que espera que lo vaya llenando con todos los sentidos que quiera.
Estos días, los sin sentidos se apoderaron de mi sentir, los viajes insensatos de las que ya están allá y me esperan, inspiran todas mis emociones. Ya no veo la hora de encontrarme con esas otras insensatas que me han ayudado tanto en esta larga espera que se está terminando.
Quiero agradecer a la persona que hizo el comentario por hacer que me cuestione estas cosas, y a partir de ello, darme cuenta del por qué me gustó tanto aquel elogio de la locura, y por qué me apasioné como pocas veces cuando leía la historia de la locura de Foucault, o cualquiera de los autores del border thinking.

Creo que esta es la forma en la que pensé este espacio, un espacio que sirva para que entre todos los que lo lean podamos ir construyendo ideas, intercambiando opiniones, más allá de mantener a todos informados de mis aventuras en el df. Pero me gustaría que todos seamos responsables de lo que decimos, y algo muy importante a mi modo de ver es ponerle el cuerpo a nuestras ideas, ponerles rostros, y si esto no es posible por la mediatización de esta instancia virtual, al menos ponerle un nombre, así sabemos con quien discutimos, y a quien dirigirnos, no me gusta el anonimato si es para desresponsabilizarse de lo que se dice...
Ahora sí me despido, la próxima vez que escriba ya lo haré desde el otro lado, contándoles algo acerca de esta locura de mis primeros días en mi nueva casa, y en mi nuevo país. Sigo feliz e indignada, y me pronuncio nuevamente y como siempre por los locos, los enmudecidos, los sin rostros, los invisibles, los insensatos, los nolugares, los borders.
Y esta vez sí les dejo un hermoso fragmento del elogio de la locura de Erasmo como cierre:

"Aunque es solamente una gota en comparación con la fuente de la divina felicidad, vale más que todas las delicias humanas juntas. ¡Tanto aventajan los deleites espirituales a los corporales y los invisibles a los visibles! El profeta anunció así a los elegidos que: «No ha visto el ojo, ni oído el oído, ni sentido el corazón jamás lo que Dios guarda para los que le aman. Y esto es una parte de la necedad, a la que no destruye la muerte, sino que la perfecciona al pasar a mejor vida. Los pocos a quienes les es dado gustar estos placeres experimentan algo muy parecido a la locura; dicen cosas poco coherentes y diversas de la costumbre humana; hablan sin sentido y cambian súbitamente de cara; tan pronto están alegres como tristes; lloran, ríen o sollozan; y, en fin, están verdaderamente fuera de sí mismos. Luego, cuando recobran el conocimiento, no saben si estuvieron dentro del cuerpo o no, ni si están dormidos o despiertos; ni recuerdan más que como a través de un sueño lo que han oído, visto, dicho y hecho; de lo único que están seguros es de que han sido profundamente dichosos durante su éxtasis, por lo cual lamentan el haber recobrado la razón, tanto que nada desean más que gozar sin interrupción de su especial locura. Tal es una ligera degustacioncilla de la futura felicidad."



jueves, 7 de agosto de 2008

Vergüenza de clase o vergüenza ajena...

Hace unos días que quiero escribir algo, actualizar el blog pero no me sale nada, lo que ocurre es que es muy difícil expresar lo que pasa por mi cabeza estas, mis últimas semanas en Argentina, en San Francisco. Lo que sí puedo decir es que me estuve riendo mucho, aunque no hubiera ningún motivo, es verdad no me voy a esconder, estoy feliz!!! y por otro lado me estuve indignando bastante.
Y como si hubiese sido a propósito, leyendo el diario esta mañana, me encuentro con una nota de opinión a la que el periodista titula "Vergüenza de clase", y me hizo pensar muchísimo en todo lo que venía indignándome estas semanas y que no podía escribir o relatar.
El autor comienza la nota con las siguientes palabras "Jamás, de ninguna manera, se me ocurriría mandar un poquito bien a la concha de su madre a la clase media de Buenos Aires. Inflo el pecho para decirlo: mi clase media." A continuación escribe algunas cosas muy interesantes acerca de lo que él piensa de este el jamón del sandwich de la sociedad argentina, y de la que también formo parte.
Si hay una característica de lo humano que me parece genial es la contradicción, porque si hay algo que nos iguala a todos son nuestras contradicciones, todos las tenemos, a veces hasta las sufrimos.
La imagen que acabo de inventar intenta representar estas, mis contradicciones, las que hoy me marcan y me hacen ser yo y no otra, ni otro... Por estas contradicciones por las que puedo ser y no ser... Porque si me ven nadie diría que mi actividad principal es la intelectual, y no solo intelectual académica sino intelectual militante, que casi siempre a la hora de pensar me encuentro lejos de las mayorías y de los pensamientos hegemónicos, que soy tan socialista como el che, sigo mis convicciones ideológicas más izquierdistas en casi todos los lugares en los que estoy pero me gusta vestirme bien, y no necesariamente cultivando esa onda hippie chic que caracteriza a los muchos que piensan igual que yo. Mi color favorito es el fucsia.
Algunas personas que me conocen saben que la boina verde con la estrella fucsia, es mi sello, es mi yo, con todas mis contradicciones, representa ese caminar y las acciones con las que me voy construyendo todos los días.
Por eso no me molesta que no se entienda ni una palabra de lo que quise decir hoy porque así es como soy pura contradicción, pero convencida de eso. Se que muchos esperarían muchísimo más de mí, sin embargo a ellos quiero decirles que lo que tengo, lo tengo porque puse todo mi esfuerzo para tenerlo, no le debo favores a nadie, salvo a mi familia que se han desalmado para que yo pueda cumplir mi sueño...
Y sí es cierto que podría estar en un lugar mucho mejor, pero depende que sea mejor para vos, si estar mejor es ganar más plata a costa de todo, no me interesa, si estar mejor sería estudiar en el primer mundo, teniendo que escribir sobre aquello que me digan los que financien mis investigaciones, tampoco me interesa, estar mejor sería trabajar para el gobierno, con el que no comparto casi nada, me interesa muchísimo menos...
Asi que para terminar este escrito quiero decir que yo no siento vergüenza de clase, si siento vergüenza ajena, por aquellos especímenes de la clase media que no entienden cual es el verdadero sentido de su existencia, que no les importa que la gente muera de hambre o no consigan trabajo, que no se meten en política porque no saben que "política hacemos todos al caminar"...
O a decir del autor de la nota que disparó mi escrito, siento vergüenza de esa clase media "mezquina, desmemoriada, garca, egoísta, autoindulgente, vigilante y un poco bastante gallina clase media que se indigna con la marca de la cartera de nuestra señora presidenta, que ve allí, en esa exaltación del consumo por el que muere mil veces, los grandes males de la patria. Y entonces se sube con la virgencita a gritar Argentina, Argentina y le estampa un beso a Luciano Miguens y le agradece por defendernos del gobierno que le cae mal".
Y yo tampoco me animo a mandarlos un poquito a la mierda (otro homenaje al negro) porque cada uno puede pensar y vivir como quiera, lo que sí estaría bueno es ponernos a ver quien vive como vive y piensa como piensa por convicción y quien lo hace porque el aire es gratis.
Por lo pronto me dispongo a terminar mis días en Argentina de la mejor manera, sabiendo que hice lo mejor y que esta oportunidad es lo que esperé tanto tiempo. Lo mejor está por venir y con la ansiedad de siempre lo espero!!! Me pueden ver feliz por lo que me pasa individualmente pero sigo tan enojada con el sistema como siempre y por eso en este momento más que nunca las contradicciones me definen...
PD: si a alguien le interesa la nota de Seselovsky la pueden leer en http://www.criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=9460